Reapertura económica aumenta contagios; Gobierno presidente Bukele advierte desborde casos COVID-19
El gobierno del presidente Nayib Bukele, advierte sobre un posible desbordamiento e incremento de los casos por COVID-19 en el país, debido a que la Asamblea Legislativa y la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, le han quitado las herramientas legales para combatir el virus que está terminando con la vida de cientos de personas y cada día, está contagiando a miles de salvadoreños desde que hizo su aparición a principio del año, según lo dieron a conocer en casa presidencial.
Tal como lo han manifestado los científicos, el mandatario salvadoreño recordó que a diferencia de otras enfermedades, en el caso del COVID19, el principal vector es el mismo ser humano, es un contagio de persona a persona, por lo que, es mucho más peligroso y difícil de combatir, si no es mediante el aislamiento social, entre otras medidas.
“El vector de esta enfermedad es el ser humano, la única forma de detener o al menos reducir su expansión es controlando la movilidad de los seres humanos”, explicó el mandatario, a inicios de junio.
De acuerdo con las informaciones, desde la primera fase de la reapertura económica, que inició el pasado 16 de junio, se han registrado más de 3,320 casos y han fallecido 128 personas, durante ese período.
Las autoridades del gobierno del presidente Bukele, recordaron que hasta la fecha han fallecido alrededor de 210 personas, desde que hizo su aparición el COVID 19, hace más de 100 días.
Según las informaciones, al gobierno le la negativa del Órgano Legislativo para aprobar una nueva cuarentena, pese a las propuestas que el gabinete ha presentado.
La negativa de los diputados, es interpreta por el presidente Bukele, que la Asamblea Legislativa no están del lado de defender la vida, lejos de eso, buscan desgastar al Órgano Ejecutivo, quitándole las herramientas para combatir el virus.
El gobierno del presidente Bukele lamenta que actualmente, solo cuenten con el Decreto Ejecutivo No. 31, que está enfocado a la repertura económica, dijeron.
“Fue así que el Gobierno del Presidente Bukele perdió facultades legales para enfrentar la pandemia del COVID-19, a tal punto que hoy lo único con lo que se cuenta es con el Decreto Ejecutivo 31, que está más enfocado en aspectos de reapertura económica que sanitarios, confirmado por el auge de casos a partir del 16 de junio, día que inició la primera fase del proceso escalonado de reactivación de varios sectores del país”, dijo casa presidencial en su sitio web.
Recuerdan que desde el 31 de enero, cuando aún no se registraba ningún caso, el Gobierno del Presidente Nayib Bukele declaró la emergencia preventiva a nivel nacional por la amenaza del COVID-19, e incluso, lo hizo antes que la Organización Mundial de la Salud (OMS) catalogara los contagios del virus como pandemia mundial.
También el Gobierno activó el Gabinete de Salud Ampliado para trabajar de forma articulada y enfrentar la enfermedad.
En esas mismas fechas y en medio de tensiones y la oposiciones de los diputados del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, FMLN, y a solicitud del presidente Bukele, la Asamblea Legislativa, aprobó con 58 votos, el Decreto de Régimen de Excepción para prevenir la propagación del virus, dijeron.
Luego de esto, el Presidente Bukele denunció un intento de desmantelar las medidas contempladas en la cuarentena domiciliar nacional, algo que con el tiempo y a más de 100 días de que inició la lucha contra el COVID-19 queda demostrado que el confinamiento es el mejor método de prevención.
“Veo a diputados amenazando bloquear las medidas que estamos tomando, personas que violan la cuarentena y quejas que serán llevados a cuarentena. Veo a unos políticos tratando de desmantelar la única protección que tenemos contra una catástrofe sanitaria, veo unos diciendo que no hay que preocuparse porque hay pocos casos”, razonó el jefe de Gobierno, a finales de marzo.Agregan que en el mes abril, el Decreto del Régimen de Excepción fue prorrogado. Sin embargo, la Sala de lo Constitucional lo anuló y, tras esta medida, comenzaron a debilitarse los cuerpos legales que el Gobierno emitió para implementar las políticas sanitarias. Todo esto sucedió entre intentos de diálogo y acuerdos por parte del Órgano Ejecutivo, que frustró la Asamblea Legislativa, entre mayo y junio.