5 de noviembre de 2024
Nacionales

Presidente Bukele, busca bloqueo a ONGs con Ley de Agentes Extranjeros, según sus coordinadores

Representantes de la Coordinadora de Movimientos Populares, Movimiento de ONGs para el Desarrollo Solidario en El Salvador, y la Alianza Nacional contra la Privatización del Agua, mostraron su desacuerdo con la aprobación de la Ley de Agentes Extranjeros, impulsada por el gobierno del presidente Nayib Bukele, por considerar que criminaliza al sector organizaciones y movimientos sociales.

Manifiestan, que desde la toma de posesión, la mayoría oficialista de la Asamblea Legislativa, se dispone a aprobar sin consultas con las partes interesadas, la Ley de Agentes Extranjeros, la cual según las organizaciones, perjudicará a la población salvadoreña más vulnerable.

Agregan que bajo el argumento transparencia y defensa de la soberanía nacional, el gobierno del presidente Bukele,  busca es preparar el terreno legal para el bloqueo financiero y la criminalización a organizaciones sociales y medios periodísticos críticos a las medidas autoritarias y neoliberales que se implementan contra de la población.

Con la aprobación de esta ley, las perdedoras serán las comunidades que se han organizado para gestionar bienes y servicios que el Estado salvadoreño no ha sido capaz de garantizar, aún sabiendo que tiene la obligación de hacerlo, concretaron.

Recuerdan que, la aprobación de la normativa, afectará los compromisos internacionales, como son, los Objetivos de Desarrollo Sostenible y múltiples tratados de Derechos Humanos, algunos de ellos violentados por el mismo régimen y que podrían anularse sin la participación activa de la sociedad civil organizada, que tiene el rol indispensable de evaluar y exigir el cumplimiento de dichos compromisos.

Recalcan, que en relación a la transparencia, las organizaciones no gubernamentales se apegan a un régimen de regulación por parte del Estado, que rige el Ministerio de Gobernación, a través de la Ley de Asociaciones y Fundaciones sin Fines de Lucro; cumplen las responsabilidades laborales y fiscales, y además se someten a la auditoría externa de los cooperantes.

Para los representantes de los movimientos y organizaciones sociales, no es razonable que el presidente  Bukele, plantee establecer un impuesto del 40% a la cooperación internacional, cuando las grandes fortunas pagan impuestos mínimos en el país y actividades improductivas, como las inversiones extranjeras en Bitcoin, están exentas de impuestos.

Señalan, que con la inclusión hasta cinco años de prisión para personas que violenten esta ley, el gobierno salvadoreño sigue el guion de otros gobiernos autoritarios de la región centroamericana que, a pesar de tener el monopolio de todas las instituciones del Estado, implementan medidas drásticas para callar y criminalizar las únicas voces críticas que provienen de la sociedad civil organizada y los medios de comunicación alternativos.

Ante ello, las organizaciones y redes articuladas manifiestan, que en la fabricación de enemigos imaginarios, el mandatario salvadoreño, intenta desviar la atención de los enemigos reales que hay que combatir: las desapariciones, el control territorial de las pandillas, el empobrecimiento, el creciente desempleo, la precarización de los servicios de salud y educación,  la violencia de género, la migración forzada, la degradación ambiental etc. todo lo cual ha aumentado en los últimos años.

Detallan, que partir de la década de los noventas, la sociedad salvadoreña comenzó un proceso de renovación democrática que incluye las garantía de un Estado Constitucional de derecho, la autonomía de los tres poderes del Estado, la separación de la fuerzas militares de la política y la seguridad pública, la independencia judicial y la participación activa de la ciudadanía en el fortalecimiento de la democracia y la contraloría social. Y es que la fiscalización de la actividad del Estado parte de instituciones independientes.

Dicen que reivindican sus legítimos derechos a la asociación con fines pacíficos, a la protesta social y a la libertad de expresión.  Las manifestaciones masivas de descontento popular desarrolladas en septiembre y octubre NO han sido producto de factores externos sino de las contradicciones entre los discursos maquillados del régimen y la creciente precariedad de la vida. No tenemos dudas de que cada día más personas abren los ojos a esta realidad que les interpela.

Finalmente, dijeron que exhortan a la población salvadoreña y a toda la comunidad internacional, relatores de derechos humanos, embajadas, países amigos e instancias internacionales orientadas a la protección de derechos, a condenar la Ley de Agentes Extranjeros.